viernes, 26 de septiembre de 2008

"Prison Break" [4x05] Safe and sound.

Quinto episodio de la cuarta temporada, "Sano y salvo", y la cosa está que arde; el hilo del anterior episodio se ha continuado un poco más, se ha complicado la situación de algunos personajes como Self y T-Bag y cruzado el camino de otros, y se ha recuperado la información de la tercera tarjeta. Exceptuando el primer episodio donde se presenta la situación, y el tercero donde surgen algunas complicaciones con el grupo, en el resto se ha conseguido recuperar una tarjeta por episodio. Un buen ritmo que augura que tras la recuperación de las tarjetas habrá mucho camino que recorrer. Además hay una regla no escrita de las películas de suspense y que en esta serie también he detectado que dice que si te cuentan un plan éste no se realizará con exactitud y surgirán muchos problemas; en cambio si no dejan ver cómo se elaborará el plan nos sorprenderán con él ejecutándolo a la perfección. Y de momento conocemos el plan de recuperar 6 tarjetas...

En el episodio anterior nos dejaron con la intriga de ver si Sara conseguiría esquivar a Wyatt, y por suerte para ella y para todos la fortuna le ha sonreído a la Dra. Tancredi cuando se ha parado y girado para darse cuenta de que la tarjeta de crédito de Bruce Bennet ha desaparecido de su cartera. Tras una carrera lo deja atrás, y aunque no la coge ya sabe que no pueden andar lejos; con los recursos que tiene este particular Terminator (¿os habéis dado cuenta de que cumple absolutamente todos los requisitos para ser un perfecto Terminator? Paso firme, lento y acartonado, expresividad nula, sangre fría, gran capacidad de búsqueda y captura, etc.) no creo que tarde mucho en dar con ellos. Volvemos a comprobar que Wyatt tiene una gran experiencia con las torturas; a Gretchen la ha sometido a una a base de nublar su juicio con olores extremos, y en este episodio ha pasado lo que se preveía en el anterior, es decir que con la ayuda del clavo que ha conseguido arrancar de la silla ha matado a su captor (a Wyatt no, al otro) y ha huido desorientada y con sed de venganza. Respecto a la fuga el General dice «Volverá a casa. siempre lo ha hecho.», así que queda saber cuál es su "casa" y con qué intenciones volverá. No podrá ir tras Whistler por su traición ya que está muerto, así que ¿se convertirá en la nueva Kellerman y ayudará a los hermanos para vengarse de La Compañía?

Respecto a la búsqueda de la tarjeta este episodio ha sido tan emocionante y tenso como los anteriores, me está gustando mucho cómo están explotando esta vertiente de la serie. El Agente Don Self reconoce al tercer propietario en la foto ampliada que realizó Scofield de la reunión de los miembros de La Compañía, lo que les da una pista a seguir e implica de lleno a Self en la recuperación de Scylla; el portador es el jefe del Departamento del Tesoro Público de Los Ángeles, Griffin Oren, y trabaja en el mismo edificio que él. Por cierto, Scofield le pide a Self que amplíe y depure las fotos en su departamento para reconocer a los otros tres propietarios de los cuales consigue el nombre, foto y datos de dos miembros y la foto del tercero, el General, lo que hace que La Compañía ponga un ojo en él en un final de episodio que nos deja de piedra al ver cuán pronto se ha visto alterado el anonimato del agente. Estoy seguro que enseguida conoceremos más de la vida personal de Self y el misterio que guarda su alianza. Después de que Self cometa varios delitos como alegar falsas afirmaciones al decirle a Oren que han sido robados unos bonos por AlQaeda (por lo cual Michael le "da la bienvenida" al club de los criminales a Self) e infiltrar a Scofield, Burrows, Bellick y Sucre en el edificio, hace salir a Sam Middleton de su despacho, el contiguo al de Griffin Oren, para que los hermanos accedan a la caja fuerte donde se esconde la tarjeta y que no es capaz de ser atravesada con el Bluetooth mágico de Glenn. Por cierto me ha hecho mucha gracia cuando al recordar Self a los hermanos que hay gente que ha puesto sus esfuerzos y habilidades en diseñar el lugar para ser impenetrable, Michael le responde que Fox River también lo fue.

Así vemos como Self, Scofield y Burrows se dedican a intentar planear la sustracción de la tarjeta, Mahone, Sara y Glenn a atrapar a Wyatt, y Sucre y Bellick a buscar a T-Bag. Siguiendo con la recuperación de la tarjeta y tras un elaborado plan —como es costumbre en ese genio que es Michael Scofield— sufrimos en nuestras carnes la tensión del momento. Porque otra cosa no, pero tensión saben crear un buen rato. El hecho de que en medio de la perforación (que bien consiguen insonorizar con la gran idea de la mancha y su limpieza) llegue El General a la habitación contigua cuando queda poco para obtener todos los datos y obligue a Griffin Oren a coger la tarjeta es de una tensión que corta la respiración. Al loro con el General que demuestra no tener ni un pelo de tonto (ups, ha sido si querer) y estar muy ducho en temas de conspiraciones al detectar que la muerte del guardaespaldas de Lisa Tabak y la estancia de Sara Tancredi en L.A. no pueden ser una casualidad. En el despacho de Oren hablan de Laos y Scofield, atento a la conversación, recaba las primeras pistas del plan que La Compañía tiene pensado aplicar al saber que Griffin Oren y Lisa Tabak se van a ese país, hecho que también detecta Sara. En Laos hay disturbios y una crisis económica, es posible que el plan de La Compañía tenga que ver con introducir dinero falso hundiendo la economía del país para luego hacerse de oro reconstruyéndolo.

A Michael, que hace unas fotos de la tarjeta y el Bluetooth (no se sabe para qué), vuelve a sangrarle la nariz y esta vez Lincoln lo detecta. Parece ser que los episodios de sangrado no son nuevos y le recuerda que con 13 años ya le sucedió y fue algo grave. Michael no quiere hablar de ello a Sara y lo achaca al cambio de clima; quizá sea una enfermedad que siempre ha tenido y que ahora vuelve por el estrés.

No vemos muchos más avances en Glenn respecto a su extraño comportamiento en anteriores episodios, aunque querría haber aprovechado para robar dinero del Tesoro con su Bluetooth; y cuando Mahone habla de buscar a Wyatt parece intentar persuadirle de que no lo mate, como si tuviera mucho que decir y no pudiese. Mahone sigue tras la caza del asesino de su hijo, y cada vez se acerca más. Tras reunirse con su esposa ella le confirma la identidad que Glenn le ha dado del asesino, le suministra una pistola y además de decirle que no se culpe pone su voto de confianza en él para que atrape al asesino y le haga pagar, igual que cuando se obsesionó con Oscar Shales, el asesino que enterró en su jardín. Con la ayuda de Sara y Glenn, y tras preguntar en el bar donde estuvo Sara, Mahone consigue encontrar el paradero de Wyatt en un motel y allí se percata de que el conserje se ha vendido al asesino, por lo que reacciona en el último momento y consigue que no se ponga en aviso por el momento. Un encuentro esperadísimo el de estos dos asesinos. Este es otro de los grandes logros de los guionistas, conseguir que un despiadado asesino como Mahone acabe provocando tanta compasión en el espectador es algo impresionante. Me reafirmo además en algo que siempre he dicho, y es que William Fichtner (Mahone) es un actorazo como la copa de un pino; y Michael Rapaport (Self) me está gustando bastante también.

Para acabar tenemos las peripecias del zorro de T-Bag, que mientras le presionan para que demuestre su habilidad de vendedor como Cole Pfeiffer descubre un contenido oculto en las hojas de la guía de aves al mojarlas con limón (como la tinta invisible), donde descubre el nombre de Scylla y unos extraños dibujos. Bellick y Sucre, encargados de buscar a T-Bag, llegan a GATE donde casi le atrapan si no es por la intervención de la secretaria de Pfeiffer, que le encubre a cambio de la avariciosa suma del cheque de bonificación de Bagwell. Éste, utilizando su habitual lengua viperina consigue que la extorsión no sea tan grande pero por eso mismo más tarde le cuesta que luego ella se plantee llamar a Bellick al teléfono que le dejaron. Pero parece que ese no es el mayor de los problemas de T-Bag ya que recibe la visita del chino asesino de Xing, el que debía encontrarse con Whistler para recibir Scylla, dándole un plazo máximo de tres días para que se la entregue bajo amenaza de muerte. Las cosas se complican para el zorro...

En definitiva un episodio movidito, donde se ha recuperado una tarjeta más, la tercera, y donde hemos visto cómo se van acercando algunos personajes a otros. ¡Y todo en tan solo 5 episodios! Me encanta esta serie, su estilo cinematográfico, su calidad en todos los apartados (técnicos incluso) y su capacidad de hacer que el espectador se rinda a las necesidades del sublime guión. Esta cuarta temporada está recuperando el espíritu de la segunda pero de forma innovadora, cambiando una vez más el concepto y consiguiendo un éxito total en su misión de conseguir una serie emocionante, seria y extremadamente entretenida. El lunes que viene más, sexto episodio "Blow out". Veremos qué es lo que tiene que apagarse...

0 comentarios:

Publicar un comentario

Selecciona el tipo de perfil para comentar. Si tienes cuenta de blogger selecciona la opción 'Cuenta de Google' e introduce tu nick y contraseña después de publicar el comentario. Si no tienes ninguna cuenta elige la opción 'Nombre/URL' en caso de que quieras dejar constáncia de la autoría de tu mensaje.